A
menudo pensamos que la historia sirve para no cometer los mismos errores una y
otra vez. Pero los humanos los seguimos cometiendo una y otra vez. Entonces la
historia no sirve para eso. La historia sirve para conocernos a nosotros
mismos, a nuestro país y a nuestra sociedad, (y a la de otros lugares). La
historia es importante porque es nuestro origen. Así como un individuo debería
conocer su historia familiar para poder conocerse mejor, al menos sus raíces,
de igual manera deberíamos conocer nuestro origen como sociedad, como país.
Un pueblo sin memoria histórica está
condenado a no saber quién es y a que sus gobernantes y los gobernantes de
otros países se hagan con el control de sus vidas. Esa es la importancia de la
historia. Los historiadores no escribimos sobre historia para hacernos famosos,
(al menos los éticos y profesionales), sino para entender nuestro presente. Y
hay muchas formas de conocer la historia. Los libros son una de esas formas,
los documentos de archivo como periódicos son otra. Pero las novelas históricas,
las películas históricas, los comics históricos y últimamente los videojuegos
históricos también lo son. Aunque se comete un error común al tratar de
determinar qué es historia y qué no lo es.
Primero que nada quiero aclarar dos puntos.
Primero. Que la historia no la conoceremos nunca, porque es el acontecimiento,
el suceso que muchas veces no presenciamos y si lo hicimos, aun así
terminaríamos por dar a conocer "nuestro"
punto de vista de ese acontecimiento. El segundo punto es el siguiente; lo
que tenemos en los libros de historia no es historia tal cual, es el punto de
vista de alguien, es historiografía. La historiografía es la interpretación que
un historiador da de cierto acontecimiento o proceso histórico. Es la forma en
que los historiadores "hacemos"
historia, la forma en que la interpretamos y la investigamos y la presentamos
al público.
Es por eso que no podemos decir que una
película, novela, comic o videojuego es historia sólo porque su trama suceda en
la época de los egipcios, o en la 2da guerra mundial, o durante alguna
revolución o independencia, o en la antigua Roma o Grecia, etc. Se tiene esa
idea arraigada, pero no es así. Si queremos darle un carácter histórico a un
producto, como una película, por un decir, debemos hacer un concienzudo
análisis e investigación tanto en fuentes secundarias (libros y revistas, sobre
todo) como en fuentes primarias (documentos oficiales y periódicos). Eso es lo
que los historiadores llamamos "estado de la cuestión" o "aparato crítico", que
será nuestra base y sustento para poder dar cierta validez a nuestra
historiografía.
A veces en las películas vemos
interpretaciones históricas hechas a la ligera, basadas las más de las veces en
la cultura popular. Por ejemplo la película Apocalypto
del 2006, en la que se enfocan en las
guerras y sacrificios entre estas civilizaciones prehispánicas, dando una
imagen de salvajismo innato. O en las
famosas películas bélicas hollywoodenses donde los EUA ganan la 2da guerra
mundial ellos solos o donde hacen la guerra en otros países porque esos países
son "incapaces" de ser democráticos por sí mismos. Esto es peligroso, porque
luego hay personas que puedan llegar a creer que efectivamente los EUA
vencieron solos a los nazis, y que además son magnánimos y van por el mundo
llevando libertad.
Pasamos de ahí a aspectos más diversos. Los
vikingos no usaban cascos con cuernos, como estamos acostumbrados a verlos. Fue
una estrategia estética de Richard Wagner para su obra "El anillo de los Nibelungos". Las culturas mesoamericanas no sólo
sacrificaban gente y se las comían algunos, esa fue una estrategia moral que
usaron los europeos para justificar la masacre de la conquista. Los nazis no
mataban solo judíos en sus campos de concentración, sino también negros,
gitanos, latinos, homosexuales, etc. Esa fue una estrategia del sionismo.
La historia busca entender y comprender una
idea, un proceso, una postura, un acontecimiento. Pero eso no quiere decir que
en aras de conseguir eso como historiadores nos olvidemos de las fechas y de
los detalles. Esa es parte de nuestra ética profesional. Por ejemplo, vemos la
película animada "El camino hacia El
Dorado", y existe una mescolanza extraña de incas con mexicas y mayas,
tanto arquitectónica como iconográficamente. Además descubrimos que el
conquistador del pueblo inca, Francisco Pizarro, se parece físicamente más a
Hernán Cortez. En otras películas sobre las culturas prehispánicas vemos el
mismo tipo de mezclas que sólo denotan el poco respeto por una cultura y la
falta de investigación por parte del guionista y el director. Se mezclan a los
mayas con los mexicas y con los toltecas y olmecas y zapotecas y totonacas, etc.
Es similar a cuando vemos películas
estadounidenses donde retratan, por ejemplo, a México como un país extrañamente
mezclado con España y demás países latinoamericanos. Otro ejemplo es la boba
película "Un chihuahua en Beverly Hills
2", donde vemos que en Guadalajara se festeja el día de muertos como un
desfile parecido a los carnavales brasileños.
Son muchas cosas que se deben de tomar en
cuenta para poder hacer una historia de ficción con fundamentos históricos,
como el lenguaje, la vestimenta, la arquitectura, la comida, la música, las
demás artes, las armas, las fechas, sus tipos de gobiernos y sus tipos de
sociedad, entre muchas otras cosas. Existen museos y libros donde podemos
investigar todas estas cosas para que nuestra historia sea más "correcta"
históricamente hablando.
Actualmente los videojuegos son una nueva
plataforma no sólo de diversión, sino que pueden usarse incluso para el
aprendizaje de materias exactas, como matemáticas, física o química, sino
también para aprender ciencias sociales o mitología. Podemos aprender mitología
en juegos como "God of war", y un
intento por enseñarnos algo de historia de la Grecia clásica. En juegos como "Medal of honor" vemos otro intento de
enseñar historia, pero desde un enfoque sumamente estadounidense. Últimamente
los diseñadores de videojuegos históricos han tenido mayor interés por hacer
las cosas mejor, como los juegos de "Assasins
Creed", donde han investigado más a fondo sobre las civilizaciones en las
que suceden las tramas.
En un siguiente artículo hablaré a fondo de
los juegos que mejor han manejado su ambientación histórica.
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